UNA INSIGNIA DE AMOR
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Febrero 17, 2008 |
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"Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo" (Mateo 13:44).
Una ceremonia muy importante fue realizada a bordo de un buque de la flota naval. La ceremonia era tan importante, que fue programado que incluso el admirante se hiciera presente a la misma. Pero entonces, se presentó un problema; la insignia del admirante estaba dañada y no podía ser usada. Avergonzado y desconcertado, el admirante dio la orden de que todo aquel que poseyera una insignia de admirante se reportara con él, pero debido a que el rango del oficial más alto en ese buque estaba mucho más abajo al de un admirante, no se halló a nadie con esa clase de insignia. El admirante, en turno, fue forzado a asistir a la ceremonia sin su insignia. Después de la ceremonia, el admirante se enteró que un alférez en un pequeño buque poseía una insignia de admirante. Curioso, el admirante preguntó a éste, el por qué no se había presentado al llamado y el alférez, aunque un poco tímido, le respondió valientemente. "Mi novia me obsequió la insignia como un regalo cuando fui nombrado alférez". Y a pesar de estar en un rango más bajo, el alférez se aferró al sueño, traído a él por su novia, de un día convertirse en admirante, y mientras vivía cada día con diligencia, en esperanza y satisfacción, eventualmente se convirtió en uno de los mejores admirantes durante la Segundo Guerra Mundial en la Flota del Pacífico de los Estados Unidos, justo así como lo habían ambicionado con su novia. La Biblia nos dice que Jesucristo es nuestro novio, y nuestro novio en turno nos promete darnos vida eterna como regalo. Es más, así como el Señor nos dice que desea vivir enamorado con nosotros por siempre en la bella y gloriosa Nueva Jerusalén, Él nos ha dado una insignia de amor. Un nuevo año ha iniciado. Y con la insignia de amor que nuestro Señor nos ha entregado, espero que cada uno de nosotros se eleve al cielo como un águila y realice un poderoso salto al año 2008.
Dr. Esther K. Chung, Ph.D. ~ Ex Presidenta, Universidad de Mujeres de Seúl ~ Presidenta, Seminario Internacional Manmin
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