Dios el Sanador (1)
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Septiembre 10, 2017 |
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 Pastor Principal, Dr. Jaerock Lee
«Y dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios,
e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti; porque yo soy Jehová tu sanador» (Éxodo 15:26).
Dios desea que Sus hijos amados permanezcan sanos y sin enfermedades. Cada enfermedad posee su causa. Ahora vamos a profundizar en qué debemos prepararnos para tener un encuentro con Dios que es nuestro Sanador y las causas de las enfermedades.
1. Para tener un encuentro con Dios debemos preparar nuestra vasija de «fe»
En la Biblia se puede encontrar que sucedieron obras asombrosamente poderosas. Los ciegos pudieron ver, los sordos llegaron a oír y los mudos lograron hablar. Un gran número de enfermedades fueron sanadas e incluso los muertos volvieron a la vida. Sin embargo, el momento que las personas fueron testigos del gran poder, algunos recibieron respuestas a través del poder aunque otros no lo hicieron. Esta diferencia se hizo en función de si tenían o no la fe necesaria.
En Mateo 9 se registra a una mujer que tenía una hemorragia durante doce años. Ella creía que se sanaría si tan solo tocaba el manto de Jesús. Tal como creyó, ella fue sanada por completo el momento que tocó Su manto. Marcos 2 registra la sanidad del paralítico. No podía acercarse a Jesús porque había muchas personas a Su alrededor. Entonces, sus amigos subieron al techo y lo bajaron a través del tejado con su camilla y lo colocaron delante de Jesús. El paralítico y sus amigos tenían la fe para que fuera sanado el momento que estuviera con Jesús.
Como vemos en los anteriores casos, para recibir la respuesta de parte de Dios debe preparar su vasija de «fe». Mientras usted tenga fe, nada es imposible para Dios; Él es el Todopoderoso (Jeremías 32:27).
En esta iglesia usted ha escuchado, visto y experimentado muchas obras poderosas de sanidad. Incluso enfermedades incurables tales como el SIDA, la leucemia y varios tipos de cáncer fueron sanadas. Todo tipo de enfermedades incluyendo las pulmonares y las hernias de disco, fueron sanadas. La pierna de una persona que era más corta que la otra debido a la poliomielitis fue alargada, y los huesos fracturados y los ligamentos desgarrados fueron restaurados. Muchos de los que llegaron en sillas de ruedas se levantaron, caminaron y saltaron. El ciego pudo ver y el mudo pudo hablar. Las personas que no tenían esperanza de recuperación debido a la intoxicación por monóxido de carbono y otras personas con sus vidas en juego, pronto fueron curadas y se recuperaron cuando recibieron oración por fe.
De la misma manera, en las cruzadas en el extranjero, innumerables personas fueron sanadas al mismo tiempo cuando oré por los enfermos desde el escenario después del mensaje.
2. Las causas de las enfermedades
1) Las enfermedades son causadas por el pecado
Cuando Dios creó los cielos, la tierra y todas las cosas en ellos, no existían las enfermedades, el dolor, los desastres ni la muerte. Pero luego de que el primer hombre, Adán, cometiera pecado, agentes como los gérmenes y los virus llegaron a existir. Es decir, el pecado de Adán es la causa inicial de todas las enfermedades.
Éxodo 15:26 insinúa que la causa de las enfermedades es el pecado. «… ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti». En el versículo hace referencia a todas las enfermedades en el mundo.
Es de notar que el caso del ciego, registrado en Juan 9, es un caso excepcional. Él nació ciego para que las obras de Dios se manifestaran en su vida. En la mayoría de los casos, sin embargo, la causa original de enfermedades o dolencias se encuentra en el pecado.
Por lo tanto, si usted quiere tener el problema de sus enfermedades o dolencias resuelto, primero debe resolver el problema del pecado. En Marcos 2, cuando el paralítico se acercó a Jesús, Él vio su fe y dijo: «Hijo, tus pecados te son perdonados». Después le dijo que se levantara, que recogiera su camilla y se fuera a casa. Inmediatamente se puso de pie y caminó.
En otras palabras, primeramente debe arrepentirse de su pecado de no haber vivido por la Palabra de Dios, y luego recibir el perdón. Luego podrá recibir sanidad de todo tipo de enfermedad.
2) Las enfermedades suceden cuando quebrantan la ley de las leyes físicas
Algunas personas mantienen hábitos poco saludables sin tener cuidado de su cuerpo. Pueden trabajar sin descanso, comer irregularmente o demasiado. A veces no comen comidas nutricionalmente equilibradas. Esto va en contra de las leyes naturales que Dios estableció. Por esta razón, tales personas no pueden ser protegidas.
Algunos incluso pueden dañar su propio cuerpo por beber alcohol o fumar. Ellos son incapaces de controlarse a sí mismos y se aferran al deseo del alcohol o de los cigarrillos. Deben arrepentirse por no haber vivido por la Palabra. No deben abusar del cuerpo que Dios les dio, sino tratar de santificarlo.
3) Los nervios o problemas mentales causan algunas enfermedades
Algunas enfermedades ocurren cuando la gente continúa siendo sometida al estrés debido a preocupaciones y ansiedades o cuando suprimen la ira, el odio o el dolor extremos. Pueden desarrollar problemas en su sistema nervioso o problemas mentales tales como neurosis, depresión y ataques de ansiedad, y esto a su vez causa problemas en otras partes del cuerpo. En algunos casos, quienes son débiles mentalmente entregan sus mentes y pensamientos a la carne, de modo que son capturados por las fuerzas de las tinieblas.
Sin embargo, tales enfermedades no pueden tocarlo si usted vive por la Palabra de Dios. Dios afirma: «Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias». Él también les dice que se regocijen siempre, que den gracias en todo, que amen a sus enemigos y que no odien. Pero si todavía tiene odio, un mal carácter y malos sentimientos, no podrá perdonar, sino que será rencoroso y sentirá odio. No podrá dar gracias, ni alegrarse, sino tendrá preocupaciones. Esto muestra que no tiene confianza en Dios, y ese es un acto de injusticia delante de Él. Por lo tanto, usted debe arrepentirse de todo esto.
4) Algunas enfermedades son traídas por el diablo enemigo
Es el caso de ser capturado por Satanás, o poseído por demonios. También hay discapacidades físicas o enfermedades que el diablo enemigo y Satanás traen. Por lo general, aparecen en una familia donde la adoración de ídolos es severa. Es porque la adoración de ídolos es uno de los pecados que Dios más detesta.
En Éxodo 20:5, leemos: «No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen».
Cuando las personas se oponen a Dios por adoración de ídolos, las consecuencias llegan a su tercera o cuarta generación. Problemas graves como la enfermedad, la discapacidad, el trastorno mental, la adicción al alcohol, la depresión y el suicidio ocurren en estas familias. Sin embargo, incluso la familia en esta situación puede ser protegida si acepta al Señor y vive por medio de la Palabra de Dios.
Así también, si sus antepasados o usted hizo cosas seriamente malas, pueden ser capturados por Satanás o poseídos por los demonios. Este es el caso cuando hacen un mal serio que va más allá del límite humano, aunque profesen su fe. Por cierto, si el paciente tiene un trastorno mental por lo cual no puede escuchar y entender la Palabra, no debe venir al templo de Dios. Pero la familia debe arrepentirse en su nombre en amor, y venir a la iglesia para recibir la oración por fe en su nombre.
Amado hermano en Cristo: si usted prepara la vasija de fe que Dios quiere y resuelve el problema del pecado, todo será posible. Ruego en el nombre de nuestro Señor que usted pueda recibir la sanidad mediante la fe, que solucione todo tipo de problema en su vida y que disfrute de buena salud espiritual y física.
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