Vitaly Tabaranu (33 años, Iglesia Manmin de Moldavia) Desde mi niñez asistía a la iglesia. Sin embargo, vivía en el pecado desobedeciendo la Palabra de Dios. No obstante ello, creía que era salvo. Mi vida no tenía sentido. ...
¡El Nacimiento de la Vida Depende Exclusivamente de Dios!
Diaconisa Saeran Cho (Parroquia 2-19, Misión de Mujeres 1-4)
Hace tres años, yo tuve un aborto diferido. Una vez que una mujer embarazada experimenta un aborto diferido, ella tiene más posibilidades de seguir abortando. En ese entonces, yo estaba en una situación muy difícil para tener un bebé, estando bajo tensión física y mental en mi lugar de trabajo y experimentado dolor de mi columna. Así que yo decidí entregar todo a Dios. El 28 de noviembre del 2008, yo me acerque al Pastor principal el Dr. Jaerock Lee para recibir oración con el deseo de quedarme embarazada. El Pastor principal dijo, "es difícil quedarse embarazada cuando el marido o la esposa tienen un cuerpo inapropiado". Ya que yo había visto a muchas mujeres en la iglesia quedarse embarazadas por el poder de Dios, yo oré sinceramente que Dios haga que mi cuerpo sea apropiado para tener un bebé. Durante aproximadamente 100 días después de la oración, yo oriné un agua que parecía al agua que queda al lavar el arroz. Yo me regocijé con la convicción de que Dios estaba cambiando mi cuerpo. Yo intenté encontrar cosas que agradaban a Dios y renuncié a mi trabajo para cumplir mi deber, dado por Dios, como líder de célula. Mi marido también me apoyó con mis decisiones. Yo me di la mano con el pastor principal con la fe de que ciertamente recibiría la respuesta y glorificaría a Dios. Yo estaba contenta como las nubes que flotan en el aire y esperé por la respuesta de Dios con expectativas. Un día, en abril yo sentí algo extraño en mi cuerpo. Fui al hospital por un chequeo con un corazón esperanzado y supe que estaba embarazada. ¡Aleluya! nosotros estamos agradecidos por la gracia de Dios que nos dio la bendición del embarazo.